Panorama

Acoso u hostigamiento
Es toda conducta abusiva y especialmente los comportamientos, palabras, actos, gestos, escritos o mensajes electrónicos dirigidos a perseguir, intimidar, chantajear, apremiar, importunar, vigilar a una mujer, y que atenten contra su estabilidad emocional, dignidad, prestigio, integridad física o psíquica, o que puedan poner en peligro su empleo, promoción, reconocimiento en el lugar de trabajo o fuera de él.

«El tema de la violencia contra la mujer en América Latina es crítico. Es la región más violenta del mundo contra las mujeres fuera de un contexto de guerra», declaró a la AFP Eugenia Piza-López, líder del equipo de género del PNUD para América Latina.

América Latina y el Caribe es la región del mundo con mayor violencia hacia las mujeres, una situación que es más crítica en Centroamérica y México.

De acuerdo con el informe de ONU Mujeres y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), el fenómeno de la agresión a mujeres persiste a pesar de la aprobación de leyes severas para frenarlo en la región.

«El tema de la violencia contra la mujer en América Latina es crítico. Es la región más violenta del mundo contra las mujeres fuera de un contexto de guerra», declaró a la AFP Eugenia Piza-López, líder del equipo de género del PNUD para América Latina.

Según el informe, América Latina y el Caribe presentan la mayor tasa del mundo de violencia sexual contra las mujeres fuera de la pareja y la segunda mayor por parte de la pareja actual o pasada.

Tres de los 10 países con las tasas más altas de violaciones de mujeres y niñas se encuentran en el Caribe, mientras que el femicidio «está tomando una magnitud y ensañamiento devastador en Centroamérica», donde dos de cada tres mujeres asesinadas mueren a causa de su género.

«En algunos países se ha convertido en una crisis severa. En el Triángulo Norte (Honduras, El Salvador y Guatemala) y México el problema del femicidio y de la violencia contra la mujer está representando niveles epidémicos, muchas veces relacionado con el crimen organizado», advirtió Piza-López.

El norte de Centroamérica es considerado una de las regiones sin guerra más violentas del mundo por la presencia de pandillas y carteles del narcotráfico.

Cultura patriarcal

El informe constata que 24 de los 33 países de América Latina y el Caribe cuentan con leyes contra la violencia doméstica, pero solo nueve de ellos han sancionado leyes que tipifican una variada gama de expresiones de violencia contra las mujeres, tanto en el ámbito privado como público. 

También destaca que 16 países han tipificado penalmente el femicidio y algunos han encuadrado en la legislación los nuevos contextos de criminalidad, como el narcotráfico y el cibercrimen, o expresiones de violencia política y el ataque con ácido.

Sin embargo, «a pesar de los valiosos avances» de los gobiernos para enfrentar la violencia contra las mujeres, «este flagelo continúa siendo una amenaza» para los derechos humanos, la salud pública y la seguridad ciudadana, indica el documento.

«Los niveles de violencia contra las mujeres a los que nos enfrentamos en América Latina y el Caribe son inaceptables», añade.

Para enfrentar el problema, Naciones Unidas recomienda robustecer las instituciones, dar continuidad a las políticas públicas que combatan la violencia y empoderen a la mujer y asignar mayores recursos para ponerlos en marcha.

También pide cambiar los «patrones culturales patriarcales» que, basados en tradiciones y creencias religiosas, «están fundados en las relaciones de desigualdad e inequidad entre hombres y mujeres».

El informe de la ONU señala que, en todo el mundo, 35% de las mujeres ha sido víctima de violencia por parte de su pareja o de agresión sexual por parte de personas distintas de su pareja.

Urgencia de igualdad

La violencia machista es una cuestión de poder y solo desaparecerá cuando haya una verdadera igualdad de género y un pleno empoderamiento de la mujer, advirtió hoy el secretario general de la ONU, António Guterres.

«Es hora de una acción común por parte de todos para que las mujeres y niñas alrededor del mundo puedan vivir libres de toda forma de violencia», dijo Guterres en un acto con motivo del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, que se conmemora el día 25 en todo el mundo.

En el evento, Guterres insistió en que, para acabar con la violencia de género, es fundamental trabajar en materia de igualdad. «La violencia contra la mujer se trata fundamentalmente de poder. Solo terminará cuando la igualdad de genero y el pleno empoderamiento de la mujer sean una realidad», apuntó.

Guterres, que se ha puesto la meta de impulsar la paridad en Naciones Unidas, confió en que se esté produciendo en el mundo un «impulso sin precedentes» en favor de la igualdad de género. Pese a ello, advirtió, queda mucho por hacer. «Necesitamos una fuerte voluntad política, más recursos y una acción coordinada», recalcó.

El secretario general de Naciones Unidas destacó que la reciente avalancha de denuncias de acoso en empresas e instituciones demuestra lo generalizado del problema de la violencia sexual. «Los ataques contra la mujer son comunes para los países desarrollados y en vías de desarrollo. A pesar de los intentos de taparlos, son una realidad cotidiana para muchas mujeres y niñas», denunció.

Diez tipos más comunes de violencias contra las mujeres: 

La violencia de género se considera como todo acto sexista que tenga o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual, psicológico, emocional, laboral, económico o patrimonial; la coacción o la privación arbitraria de la libertad, así como la amenaza de ejecutar tales actos, tanto si se producen en el ámbito público como en el privado.

Uno de los pasos fundamentales para acabar con este estigma es el reconocimiento público de las diferentes formas en las que se expresa la violencia de género. Con ese propósito, aquí reseñamos los diez tipos más comunes de violencias contra las mujeres: 

1. Violencia psicológica
El maltrato psicológico constituye una forma de abuso más sutil y difícil de percibir, pero no por eso menos traumático para las mujeres que lo padecen. Es toda conducta activa u omisiva ejercida en deshonra, descrédito o menosprecio al valor o dignidad personal, tratos humillantes y vejatorios, vigilancia constante, aislamiento, marginalización, negligencia, abandono, celotipia, comparaciones destructivas, amenazas y actos que conllevan a las mujeres víctimas a disminuir su autoestima, a perjudicar o perturbar su sano desarrollo y a la depresión e incluso al suicidio.
2. Violencia sexual 
Es toda conducta que amenace o vulnere el derecho de la mujer a decidir voluntaria y libremente su sexualidad, comprendiendo ésta no sólo en el acto sexual, sino toda forma de contacto o acceso sexual, genital o no genital, tales como actos lascivos violentos o acceso carnal violento o la violación propiamente dicha. Incluye el uso de la fuerza o intimidación dentro del mismo matrimonio o de otras relaciones vinculares o de parentesco, exista o no convivencia, así como la prostitución forzada, explotación, esclavitud, acoso, abuso sexual y trata de mujeres.
3. Violencia patrimonial y económica
Se considera violencia patrimonial y económica toda conducta activa u omisiva que directa o indirectamente, en los ámbitos público y privado, esté dirigida a ocasionar un daño a los bienes muebles o inmuebles en menoscabo del patrimonio de las mujeres víctimas de violencia o a los bienes comunes. También la que se dirige a ocasionar un menoscabo en los recursos económicos o patrimoniales de la mujer, a través de la perturbación de la posesión, tenencia o propiedad de sus bienes, pérdida, sustracción, destrucción, retención o distracción indebida de objetos, instrumentos de trabajo, documentos personales, bienes, valores y derechos patrimoniales. Incluye todo acto que genere limitaciones económicas encaminadas a controlar sus ingresos, o la privación de los medios económicos indispensables para vivir.
4. Violencia simbólica 
Es la que se ejerce a través de patrones estereotipados, mensajes, valores, íconos o signos que transmiten y reproducen relaciones de dominación, desigualdad y discriminación en las relaciones sociales que se establecen entre las personas y naturalizan la subordinación de la mujer en la sociedad.
5. Acoso u hostigamiento
Es toda conducta abusiva y especialmente los comportamientos, palabras, actos, gestos, escritos o mensajes electrónicos dirigidos a perseguir, intimidar, chantajear, apremiar, importunar, vigilar a una mujer, y que atenten contra su estabilidad emocional, dignidad, prestigio, integridad física o psíquica, o que puedan poner en peligro su empleo, promoción, reconocimiento en el lugar de trabajo o fuera de él.
6. Violencia doméstica
Aquella conducta activa u omisiva, constante o no, de empleo de fuerza física o violencia psicológica, intimidación, persecución o amenaza ejercida contra una mujer por un integrante del grupo familiar, persona con quien mantiene o mantuvo relación de afectividad, ascendientes, descendientes, parientes colaterales, consanguíneos y afines, independientemente del espacio físico donde ésta ocurra, y que dañe la dignidad, el bienestar, la integridad física, psicológica, sexual, económica o patrimonial, la libertad, comprendiendo la libertad reproductiva y el derecho al pleno desarrollo de las mujeres. Incluye las relaciones vigentes o finalizadas, no siendo requisito la convivencia.
7. Violencia laboral
Es la discriminación hacia la mujer en los centros de trabajo públicos o privados que obstaculicen su acceso al empleo, ascenso o estabilidad en el mismo, tales como exigir requisitos sobre el estado civil, maternidad, la edad, la apariencia física o buena presencia, o la solicitud de resultados de exámenes de laboratorios clínicos, que supeditan la contratación, ascenso o la permanencia de la mujer en el empleo. Constituye también discriminación de género en el ámbito laboral quebrantar el derecho de igual salario por igual trabajo. Así mismo incluye el hostigamiento psicológico en forma sistemática sobre una determinada trabajadora con el fin de lograr su exclusión laboral.
8. Violencia obstétrica
Se entiende por violencia obstétrica la apropiación del cuerpo y procesos reproductivos de las mujeres por personal de salud, que se expresa en un trato deshumanizador, en un abuso de medicalización y patologización de los procesos naturales, trayendo consigo pérdida de autonomía y capacidad de decidir libremente sobre sus cuerpos y sexualidad, impactando negativamente en la calidad de vida de las mujeres.
9. Violencia mediática
Aquella publicación o difusión de mensajes e imágenes estereotipados a través de cualquier medio masivo de comunicación, que de manera directa o indirecta promueva la explotación de mujeres o sus imágenes, injurie, difame, discrimine, deshonre, humille o atente contra la dignidad de las mujeres, así como también la utilización de mujeres, adolescentes y niñas en mensajes e imágenes pornográficas, legitimando la desigualdad de trato o construya patrones socioculturales reproductores de la desigualdad o generadores de violencia contra las mujeres.
10. Violencia institucional
Son las acciones u omisiones que realizan las autoridades, funcionarios y funcionarias, profesionales, personal y agentes pertenecientes a cualquier órgano, ente o institución pública, que tengan como fin retardar, obstaculizar o impedir que las mujeres tengan acceso a las políticas públicas y ejerzan los derechos previstos en las leyes para asegurarles una vida libre de violencia. Así mismo, en algunos países se han tipificado otras modalidades de violencia entre ellas la prostitución forzada, la esclavitud sexual, el acoso sexual, la violencia en pareja, la violencia comunitaria y la esterilización forzada, entre otras.

Fuentes

El Espectador

Coomeva
Profamilia. Violencia contra las mujeres en Colombia. 2013.
– Organización Mundial de la Salud, OMS. Nota descriptiva N°. 239 sobre violencia contra la mujer. Octubre de 2013.
– Delia Burgos, Gladys E. Canaval, Natalia Tobo, Pilar Bernal de Pheils y Janice Humphrey. Violencia de pareja en mujeres de la comunidad, tipos y severidad, Cali, Colombia. Revista de Salud Pública, 2012.
– Womens Health womenshealth.gov/espanol/violencia-contra-mujer.