En la actual coyuntura, la corrupción ha escalado la más alta cota histórica de 174 años de tránsito republicano, y diferente a situaciones parecidas, no iguales, rebasada por mucho por los presidentes Leonel Fernández y Danilo Medina, resulta que el imperio presiente la conjunción de una serie de factores que provoquen un estallido social por demasiada presión en la caldera popular, y planea el cambio pacífico del statu quo imperante.
Opinión
Corrupción culminará Waterloo del PLD
Por UBI RIVAS
El 19 de junio último, publiqué un breve artículo intitulado “Odebrecht será Waterloo del PLD, que ahora amplió y sustancio para una mejor interpretación de mi conceptualización en relación al final de la Era del PLD en el poder.
Hasta ahora, la corrupción no ha determinado la motivación para sustituir o concluir la vigencia de un gobierno, recordando que en el caso del presidente Ulises Heureaux, el terrible Lilís, la corrupción, que trepó una cota superior a la del gran ciudadano Buenaventura Báez Méndez, no fue el pivote decisorio de su ajusticiamiento en Moca el 26 de julio de 1899, sino el descalabro de los tabaqueros, que era la espina dorsal de entonces de la economía por las emisiones sin respaldo de las famosas “papeletas” de Lilís.
La culminación de la Era de Trujillo no fue atribuída a la corrupción, monopolizada por el dictador sino el exceso de crímenes que diseñó el tétrico coronel del Ejército Johnny Abbes García, por instrucciones que se conocerán algún dìa, de su vinculación como agente secreto de la Agencia Central de Inteligencia (CIA).
Concerniente al presidente Joaquín Balaguer tampoco fue la corrupción el motivo de culminar los sangrientos Doce Años (1966-1978), que fue breve, sino idéntico a El Jefe, los crímenes de Estado contra los principales dirigentes de la izquierda, sobre todo los comunistas más vitriólicos del MPD, que consternaron la conciencia nacional.
Fue una circunstancia áspera y cruenta, en que los cabecillas izquierdistas confundieron que enfrentaban al presidente Balaguer, cuando en realidad enfrentaban al imperio, en la etapa urente de la Guerra Fría, conforme categorizó el embajador norteamericano Hugh Crimmins al presidente Balaguer el mandato del presidente Richard Nixon de proceder contra las izquierdas, o abstenerse a las consecuencias, y el entendió y ejecutó el mensaje, porque, primero Dios, y luego sus santos.
En la actual coyuntura, la corrupción ha escalado la más alta cota histórica de 174 años de tránsito republicano, y diferente a situaciones parecidas, no iguales, rebasada por mucho por los presidentes Leonel Fernández y Danilo Medina, resulta que el imperio presiente la conjunción de una serie de factores que provoquen un estallido social por demasiada presión en la caldera popular, y planea el cambio pacífico del statu quo imperante.
En una expresión inusitada en el estilo diplomático, el Encargado de Negocios de la misión norteamericana, es decir, el representante del presidente Donald Trump, manifestó en el principal titular del Listín Diario del día primero del presente mes, en términos diplomáticos inusuales:
“EEUU espera que lleven a la Justicia a los ladrones de recursos del pueblo”, luego de salir de una visita al procurador general de la República, Jean Alain Rodríguez, a sugerencia de éste.
El día 2 del presente mes, los medios de comunicación difundían la visita de Robert Copley al presidente Danilo Medina, acompañado de varios legisladores estadounidenses, Maureen Mcgovern, oficial política de la embajada, y Sally Yearwodm directora del Caribbean Central American Action, donde trataron con el gobernante el tema de la inmigración haitiana que sofoca al país, igual que la norteamericana con sus vecinos mexicanos, hondureños, salvadoreños y nicaragüenses .
El periódico Día del 3 de este mes, desplegaba una sustanciosa información identificando el monitoreo del imperio de las operaciones de Odebrecht en nuestro país.
El día 1 de ese mes, Diario Libre informaba que 17 diputados leonelistas se abstuvieron de investigar las andanzas mafiosas de Joao Santana, ex asesor de campaña del presidente Medina a quien su gobierno pagó RD$1,400 millones por sus servicios, auto incriminándose por negar investigar el caso, en vez de posibilitar la pesquisa.
El 31 de julio reciente, el presidente de la Confederación de Comercio y Pymes, Gilberto Luna, manifestó a El Nacional, que su sector está preocupado “porque en el país se están creando condiciones para estallidos que lleven a situaciones como las ocurridas en otros países de la región, con saqueos de comercio y otros atentados a la propiedad, ante la demanda justa del cese de los apagones, aumento de los combustibles y el pasaje en algunas rutas y poblaciones”
Hoy del ía 8 de este mes titula una noticia denunciando el precio de alimentos que pueden subir hasta un 200%, promedio l00%, y en el arroz hasta 200%, conforme estudio del Programa Mundial de Alimentos (PMA), y otra información del mismo diario de ese dìa, donde dice que los ingresos de los trabajadores rurales apenas alcanza RD$400 diarios, cuando el costo de la canasta familiar màs baja es de RD$l5 mil mensual.
El escándalo de los terrenos Los Tres Brazos que involucra RD$l,000 millones, es el mas reciente caso de corrupción, precedido por OISOE, Odebrecht y Andrade Gutiérrez, y en estos dos casos, el imperio se sintió desplazado de su protagonismo constructor y los equipos que construye para esos menesteres por un país subdesarrollado.
El pasado día 2 el presidente Medina asistió a la inauguración a un costo de RD$35 millones, de una fábrica de ropa militares en Bonao, propiedad del Ministerio de Defensa. Instituyendo la competencia desleal del Estado a la manufactura privada, para hacer más ricos a los militares, en vez de custodiar de verdad, sin aguajes, la frontera y expulsar a los indocumentados.
Fuente El Nacional