Santo Domingo.– Si bien el vicepresidente del Consejo Nacional para el Cambio Climático y Mecanismo para el Desarrollo Limpio (CNCCMDL), Max Puig, expresa que República Dominicana tendrá que invertir US$18,000 millones al 2030 para mitigar y adaptarse a los efectos climáticos, los medioambientalistas indican que involucrar a los niños con el cuidado del planeta Tierra permitirá que crezcan futuras generaciones con conciencia ecológica.

Ante esto surgen programas como Huellas de Cambio, impulsado por Bupa Dominicana, que promueven la protección del medio ambiente a cargo de 1,300 estudiantes en el 2023. Esto significa 1,000 personas más que el 2022, cuando la iniciativa fue ejecutada por 300 niños.

Así lo indica la gerente general de la multinacional, Marién Lamboglia, al destacar que es un proyecto que refleja la visión corporativa de guiar a los infantes a construir un lugar más sostenible en el cual vivir.

“Este es un espacio para que los estudiantes elijan qué sembrar, pero mayormente son árboles de frutas, vegetales, plantas medicinales y flores polinizadoras, siendo un cultivo libre de químicos”, agregó.

De acuerdo con organismos internacionales, 2,600 millones de personas dependen de la agricultura, pero el 52% de la tierra se ve afectada por la degradación del suelo. Esta acción, según la Organización de las Naciones Unidas, provoca la desaparición de 13 millones de hectáreas de bosques, lo que supone retos para el desarrollo sostenible de las naciones.

Para evitar las consecuencias de esto, la ejecutiva afirma que el proyecto se desarrollará bajo el método Tini.

“Este espacio promueve la biodiversidad, ya que un tercio de los alimentos cultivados son para consumo propio, el restante para compartir entre los compañeros y para volver a sembrar los árboles previamente cosechados”, explicó.

Sustentabilidad

El ítem 15 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) establece que el 30% de la superficie terrestre está cubierta por bosques, los cuales proporcionan seguridad alimentaria y son fundamentales para combatir el cambio climático. En tanto, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) estima que las pérdidas anuales provocadas por el cambio climático podrían alcanzar los US$22,000 millones para el 2025 en la región.

Solo los tres mayores sectores más dependientes de la naturaleza generan cerca de US$8,000 millones de valor agregado bruto (VAB), siendo la industria de la construcción la que más registra, con US$4,000 millones, seguido de agricultura con US$2,500 millones y alimentos y bebidas por US$1,400 millones, señala la empresa de consultoría PWC.

La ejecutiva indica que el propósito es que los infantes aprendan sobre el planeta Tierra y se conviertan en adultos responsables y agentes de cambio. Y no es para menos, ya que el Banco Mundial estima que el 16% de la población mundial está entre los 15 y 24 años.

Eldinero/Karla Alcántara