Santo Domingo.- En vista de los graves peligros para la salud que representa el alto consumo de azúcar desde la niñez, el Instituto Nacional de Bienestar Estudiantil (Inabie) ha adoptado en los últimos dos años escolares una medida que va camino a reducir la ingesta de alrededor de 18 millones de libras de este producto, con la eliminación de néctares azucarados que eran servidos diariamente en la alimentación escolar a más de 1.4 millones de estudiantes.
La medida se llevó a cabo luego de que la nueva administración que dirige la entidad recibiera informes sobre la incidencia en el aumento de los índices de sobrepeso y obesidad de estas bebidas que eran usadas para complementar el almuerzo en las escuelas.
“Desde que llegamos a esta institución la eliminación del néctar fue una de las principales medidas que tomamos. Esto, en vista del alto índice de sobrepeso y obesidad que se determinó en un estudio realizado junto a Salud Pública, de un 31.2 %, y las consecuencias negativas del exceso de azúcar para la salud”, explicó Víctor Castro, director ejecutivo del INABIE.
Los néctares se servían en empaques de 200 mililitros que contenían en promedio entre 20 y 23 gramos de azúcar. Es decir, en una sola bebida al día los estudiantes estaban consumiendo cantidades cercanas al límite permitido para las 24 horas del día por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Esta cantidad idealmente es de unos 25 gramos de azúcar para un niño que consume unas 2,000 calorías en promedio.
Tras implementar la medida en 2022, para el cierre del presente año escolar se proyectaba que los estudiantes recibieran 405.8 millones de néctares con un contenido estimado en conjunto de 8,116 millones de gramos de azúcar, lo cual representa los 18 millones de libras de este producto que se habrán reducido a junio de este 2024.
Castro resaltó que en sustitución de esos néctares se inició un proyecto de inclusión de frutas frescas que ya tiene éxito en su distribución en escuelas de dos provincias del país y espera ser expandido a más de 5,000 centros educativos a nivel nacional.
“Con la inclusión de frutas estamos apostando a dotar a los estudiantes de alimentos más saludables, además de que era el único grupo de alimentos que nos faltaba en la alimentación escolar”, resaltó Castro.
La decisión fue tomada con base en recomendaciones de los especialistas del INABIE por la pandemia que representa el sobrepeso y la obesidad en la actualidad y por su relación directa con enfermedades crónicas no transmisibles como la diabetes, hipertensión, enfermedades coronarias, algunos tipos de cáncer, entre otras.
En la actualidad, la República Dominicana mantiene el liderazgo en la región del Caribe en cuanto a cobertura del Programa de Alimentación Escolar (PAE), una de las herramientas más efectivas para combatir la malnutrición, al seguir modelos de alimentación más saludable y educación nutricional.