Mártir de la prensa

Orlando Martínez Howley (1944-1975)

Editorial Opinión El Nacional

historia dominicana reconoce a grandes adalides que ofrendaron sus vidas en incesante lucha por la independencia, soberanía, democracia, libertad, equidad y justicia, entre los que figura Orlando Martínez, mártir de la prensa, a quien hoy la sociedad recuerda con admiración y respeto, al cumplirse el 47 aniversario de su vil asesinato.

Desde la tribuna de la prensa de opinión, Orlando denunció con valor, pasión y entereza los crímenes, deportaciones, encarcelamientos y otras formas de represión política endilgados al “gobierno de los 12 años” del presidente Joaquín Balaguer.

La corrupción administrativa, que todavía lacera al erario, fue combatida de manera frontal por el columnista de El Nacional y director de la revista ¡Ahora!, que también fue escudero del campesinado nacional en su reclamo por una auténtica reforma agraria y de los trabajadores por el derecho a sindicalizarse.

El espacio democrático de hoy, aun defectuoso, debe mucho a la valiente pluma de Orlando Martínez, que no conoció el temor que infundía el uniforme indigno, la traición artera ni la genuflexión política, porque sus escritos fueron dirigidos siempre a tocar la diana de la libertad y del ejercicio de los derechos ciudadanos.

Su vida fue segada el 17 de marzo de 1975 por un grupo de sicarios civiles, policías y militares que interceptaron su vehículo en la avenida Cristóbal de Llerena en la cercanía de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, donde le propinaron dos balazos.

Sus asesinos fueron bautizados por el propio presidente Balaguer como “incontrolables”, cuyas identidades prometió revelar en una página en blanco de su libro autobiográfico, que habría encomendado a una persona que conforme a la ley biológica debía sobrevivirle. Esa hoja fue una premeditada ignominia.

La figura de Orlando Martínez emerge hoy como vivo ejemplo de periodismo valiente y responsable que debería servir de luz y norte a generaciones de periodistas que afrontan un ejercicio profesional lleno de peligro e incertidumbre, en el que se mercadean la “fake news” o la “post verdad”, engendros de mentira y manipulación.

Al conmemorar hoy el 47 aniversario de un inolvidable miembro de su redacción, El Nacional reitera su compromiso irrenunciable de promover y defender sin temor ni dobleces los mismos principios de libertad y de justicia por los que ofrendó su joven vida ese mártir de la prensa, Orlando Martínez.


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