Educar para la paz es una forma de educar en valores. La educación para la paz lleva implícitos otros valores como: justicia, democracia, solidaridad, tolerancia, convivencia, respeto, cooperación, autonomía, racionalidad, amor a la verdad… La educación en valores es un factor importantísimo para conseguir la calidad que propone nuestro sistema educativo.
Educar en la conducta de la paz a los niños
Comenzar desde la Educación Infantil. La paz debe de actuar como soporte del sistema educativo siendo el primer eslabón de la educación de los niños. Solamente con una educación desde la primera etapa de la infancia, conseguiremos fomentar la paz en los niños. Desde la educación inicial o preescolar, fomentar la armonía y educarlos en valores ayudará que se formen y desarrollen desde el principio
HOMBRE Y SOCIEDAD
Por Julio Vidanes Díez
Educación para la paz y la no violencia
No es una opción más, es una necesidad
La educación para la paz no es una opción más sino una necesidad que toda institución educativa debe asumir. Los principios para una convivencia pacífica entre pueblos y grupos sociales se han convertido en un imperativo legal. Ahora se trata de conseguir que el derecho formal de la paz se convierta en un derecho real.
Educar para la paz es una forma de educar en valores. La educación para la paz lleva implícitos otros valores como: justicia, democracia, solidaridad, tolerancia, convivencia, respeto, cooperación, autonomía, racionalidad, amor a la verdad… La educación en valores es un factor importantísimo para conseguir la calidad que propone nuestro sistema educativo.
Podemos realizar una breve retrospectiva histórica, recordando que la educación para la paz se inicia con el movimiento de la Escuela Nueva, recibe el apoyo institucional de la UNESCO, se enriquece con el ideal de no-violencia y continúa su andadura a través de la Investigación para la Paz y el Desarrollo. Superada la clásica oposición paz contra guerra, actualmente se propone la paz como antítesis de la violencia, la llamada paz positiva. Este aspecto encuentra su mejor marco de actuación pedagógica dentro del modelo sociocognitivista de Vigotsky (1979).
La moderna educación para la paz asume creativamente el conflicto como un proceso natural y consustancial a la existencia humana. La educación para la paz ayuda a la persona a desvelar críticamente la realidad compleja y conflictiva para poder situarse en ella y actuar en consecuencia. Educar para la paz es invitar a actuar en el microcosmos escolar y en el macronivel de las estructuras sociales. Los componentes de la educación para la paz son: la comprensión internacional, los derechos humanos, el mundo multicultural, el desarme, el desarrollo, el conflicto...
Las reformas educativas insisten en la necesidad de una educación para la ciudadanía y los valores en general. Todas estas buenas intenciones deben concretarse en disposiciones legales positivas. La enseñanza de contenidos específicos debe estar unida a la formación de hábitos y habilidades sociales, desarrollando programas adaptados a las diferentes situaciones.
Julio Vidanes Díez
Profesor en la Facultad de Educación y en el Centro de Formación del Profesorado, Universidad Complutense de Madrid, España
Fuentes
Revista Iberoamericana De Educación