A partir de mis aspiraciones a la Alcaldía de Santo Domingo Este, conjuntamente con mi ingreso al Partido Revolucionario Moderno, asumí con responsabilidad el sacrificio que esto suponía, para la construcción de una carrera política en municipio donde el liderazgo femenino, pendula entre la desaparición y el esfuerzo sobre humano para competir en un mundo sustentado en la desigualdad.
Aun así, y, a sabiendas de los contratiempos, salimos a solicitar el respaldo de compañeros y compañeras que se habían apartado del quehacer partidario, por la frustración que les generaron algunos procesos y por la desconfianza en los políticos tradicionales, acostumbrados a buscar apoyos en tiempos de campañas y a olvidarse de la gente, en épocas en que la parafernalia no juega un papel preponderante en la vida de los hombres, a los que debemos nuestra férrea lealtad por haber asumido con dignidad nuestras propuestas.
Esto, forjó en mí, ideas y criterios propios y reafirmó el compromiso que tengo con mi municipio, lugar en el que nací y crecí, en medio de las precariedades que arropan a la inmensa mayoría, de trabajar mano a mano con mi partido y nuestra gente, para mejorar desde el ejecutivo y el cabildo, la vida de mis conciudadanos. No hay un solo día, que no invada mi mente las carencias materiales por la que atraviesan miles de familias, y eso me obliga redoblar la lucha para que exista un cambio rotundo en el manejo de la cosa pública.
Siendo una mujer de fe inquebrantable, creo en la unificación de la familia como fórmula perfecta para alcanzar el éxito. Y, creo también, en una visión conjunta para el desarrollo proyectos importantes que unifiquen el núcleo del hogar en el devenir situaciones que pudieran no siempre ser las esperadas. Pero también, apelo a la democracia interna, a la diversidad de ideas y a la independencia de criterios para la formulación de opiniones en cuanto al proceder ideológico en materia política partidaria y a la libre elección siempre que exista el respeto a la diversidad.
Dicho esto, solo resta concluir que nos mantendremos firmes en nuestra lucha integral por el cambio. Que, no obstante, cualquier aspiración que no se enmarque dentro de lo que hemos asumido como norte, estaremos al lado del próximo y seguro presidente Luis Abinader y nuestro amigo y líder Hipólito Mejía hasta conseguir la victoria. Asimismo, lucharemos junto a Manuel Jiménez, sin dudas el próximo alcalde de Santo Domingo Este, para conquistar la victoria del PRM y fuerzas aliadas en las elecciones de febrero próximo.
Katy Báez @PRM_Oficial
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Fuente: Joan Leyba Mejía
