Opret socializa con ocupantes y propietarios de terrenos

La modernidad del sistema de transporte colectivo apunta hacia Los Alcarrizos con la construcción de la Línea 2-C del Metro de Santo Domingo, que según las autoridades, beneficiará a un millón de personas que residen en populosos barrios y residenciales del municipio Santo Domingo Oeste y parte del Distrito Nacional.

Es una de las obras cumbres del gobierno que encabeza el presidente Luis Abinader, que incluye, además, el Teleférico de Los Alcarrizos y una terminal de autobuses del Cibao, todas confluyentes en el denominado Multimodal del kilómetro 15 de la Autopista Duarte.

El Metro, que está contemplado ser terminado el próximo año a un costo superior a los 500 millones de dólares, y que generaría más de 2,500 empleos directos, es parte del proyecto original del sistema diseñado durante los gobiernos del expresidente Leonel Fernández, pero rediseñado por las actuales autoridades.

Se trata de dos obras conjuntas, el Metro, que contará de cinco estaciones elevadas a partir del túnel de 800 metros que conectará la Estación María Montez del kilómetro 9 de la autopista Duarte, hasta la entrada de Los Alcarrizos.

Paralelamente se construirá una marginal que permitirá la circulación vehicular de la parte local de la zona, un valor agregado que permitirá desahogar esa parte de la Autopista Duarte donde confluyen cientos de vehículos y forman largos tapones todos los días.

Lo que se hace

Rafael Antonio Santos Pérez, director de la Oficina para el Reordenamiento del Transporte (Opret) cuenta que en menos de dos semanas se estará trabajando en las excavaciones internas del túnel en la parte del barrio Enriquillo que se espera concluir en un plazo de unos seis meses, mientras se continúa el proceso de socialización y pago de otras 60 viviendas.

“Ahí tú vas a encontrar unos pilotes de metal como sellando la puerta del túnel, en esos pilotes se ponen las primeras cerchas, que es lo que apoya el túnel y se cortan los pilotes en la entrada del túnel, ahí comenzamos a cavar…tenemos que preparar esa boca del túnel para que no se nos vaya a derrumbar porque los primeros metros son los más difíciles”, explica Santos Pérez.

Explicó que en principio los trabajos son lentos por la naturaleza de las excavaciones, pero que después que se hagan los primeros 10 metros del túnel y la máquina esté cubierta adentro, la tierra va mejorando y se pueden hacer diariamente ocho y hasta 10 metros hasta completar los 800 que contempla el proyecto soterrado.

Sostuvo que en término de ingeniería no se puede decir que los trabajos del túnel comienzan después que la máquina tuneladora está bajo tierra porque en este caso se tiene más de un mes trabajando en la parte de la instalación del campamento y en la preparación de la rampa.

Una vez el Metro salga del túnel se incorporará a la parte elevada protegido de un “falso túnel” de unos 150 a 200 metros para luego proseguir a una altura de unos 6 metros hasta Los Alcarrizos, explicó el director de la Opret.

“Cuando lleguemos al corte de la cañada de Guajimía sale el Metro, pero ya sale a seis metros de altura y ahí no lo alcanza nadie… siempre se va a mantener mínimamente a seis metros de altura, desde ahí hasta Los Alcarrizos”, informo.

DiarioLibre