Opinión
De La Redacción
El nuevo presidente de México, Manuel López obrador, presentó un discurso sin desperdicios. Cargado de humildad, sin fanatismo, honesto y presentó una posición muy cercana a su pueblo mexicano.
Humilde y honesto
En todo momento su discurso mantuvo una línea muy cercana a la humildad y apelando a la humanidad, fue realista con relación a la situación actual de méxico, no trato de jugar con la capacidad de analisis del pueblo mexicano. Reconoció las debilidades, y las fortalezas del partido, del pueblo y de mexico como nacion. Presentó una enérgica oposición en contra de la corrupción y de los privilegios de los funcionarios a costa del trabajo del pueblo.
Que aprendan nuestros gobernantes
El presidente de la República Dominicana, Danilo Medina se encontraba dentro de los altos mandatarios invitados, esperamos que haya aprendido algunas lecciones de dicho discurso.
Algunas lecciones para nuestros gobernantes y funcionarios:
La honestidad los mantendrá lejos de la cárcel, la corrupción debe castigarse severamente, ningún político ni funcionario tiene el derecho a robar, no debe haber espacio para la impunidad, no engañe al pueblo, no diga mentiras, no disfrace la realidad con una publicidad cara y engañosa, hay que eliminar los lujos y privilegios a los altos funcionarios, el pueblo debe ser escuchado, nunca traten de imponer lo que el pueblo no quiere ni le conviene aceptar, al pueblo hay que consultarlo, el gobierno debe ser cercano al pueblo, porque a la corta o a la larga como afirmó Manuel López Obrador en su discurso, «El pueblo pone y el pueblo quita», verdad total y absoluta.
Todo nuestro respeto siempre Redacción @LaVozDelPRM
