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DORADOS AUSPICIOS A CAROLINA

Opinión por Ubi Rivas

Ubi Rivas.

Carolina Mejía Gómez de Garrigó, electa alcaldesa del Distrito Nacional en los recientes comicios municipales, inicia su gestión este jueves l6, deseándole fervorosamente el más dorado de los auspicios que concluya con excedente aprobatorio por sus 860 mil munícipes, de los que el suscrito es el último.

Conocí a Carolina cuando apenas tenía entre dos y seis años visitando a su padre agrónomo Hipólio Mejia cada mañana entre l978-82, entonces ministro de Agricultura, sin volverla a ver nunca después.

El tiempo ha rodado como una noria de acción contínua, como las mareas, y Carolina devino, igual que su padre, más política que economista, y aquel, más político que agrónomo, y este l6 inicia el toreo a un toro de 357 kilómetros cuadrados que es el área del DN, con retos sin tregua en la zona más representativa del país.

Esto así, porque el DN es asiento de la Presidencia de la República, todas las embajadas y consulados, inclusive residencia de la embajada imperial, Palacio PN, Banco Central, Aduanas, ISR, todos los ministerios, los grandes malls, Bellas Artes, TN, JCE, monitoreos del narco, RTVD, UASD, UNIBE, INTEC, O y M, UTESA, Banco Central, Banco de Reservas, todos los clubes sociales.

EL DN es la concentración de los poderes determinativos del destino nacional, y todos los municipios adyacentes, es tierra conquistada, conforme afirman los asturianos de España.

La múcura que asume Carolina no es nada ligera, y poner distancia políticamente con su progenitor debiera consistir su primer reto, por lo mismo que todos pensamos.

Distancia no traduce reducción afectiva, sino providencia y visión de una nueva trova, en lo más hondo de mi sentir, auspicio su éxito rotundo, que la praxis y la historia, negaron

Carolina Mejía inicia su gestión edilicia como Alcaldesa del DN este l6, heredando irresueltos problemas de su antecesor David Collado, con el lastre del cobro de los proventos declinante, escenario de la tragedia de salud planetaria que presenta la pandemia Covid l9, a ejecuciones que no entienden de problemas accesorios, reclamos de munícipes.

El primer problema, por demás ancestral, que hereda Carolina, es rescatar los espacios públicos ocupados en mayor porciento por nacionales haitianos indocumentados, que en el sector Gascue donde resido, podría señalarle, conforme ofrecí a David Collado, espectáculo deprimente que no se observa ahora, en la alcaldía de Abel Martínez en Santiago, ni nunca en Baní. 

El prolongado deterioro del RC2 en prolongados tramos. Caos tránsito vehicular, sin ningún programa de solución, con más de 40 mil carros de concho “arañas”, tiestos inservibles, sin luces y no pocos sin placas, conducidos por tigres de dos patas desaseados con temeridad, ansiones de colisionar con vehículos caros porque esa sería su salvación, que hasta hoy ningún alcalde logró controlar.

Solución proyecto con todos los alcaldes del GSD creando una planta recicladora residuos sólidos procesándolos y convertirlos en riquezas, vidrios, plásticos, abonos, hierro, eliminando para siempre Duquesa.

Irrespeto a la preferencia de vía, interceptada por todos sin un ápice de aguardar el pase preferencial, sin respetar las líneas que indican no entorpecer las esquinas álgidas ni las rayas zebra 

Tapas de plásticos irrompibles en los bornes y rejillas alcantarillado evitando trasiego de sólidos que sofocan drenaje.

Horarios diferentes ingresos administración pública, docencia, comercios, bancos, entre una y otra hora, descongestionando las vías.

Conjunto de providencias que muchos, el suscrito inclusive, exponemos desde hace tiempo, sin solución.

Carolina tiene el chance y el reto.

¡Exitos, Carolina!

Por Ubi Rivas

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Fuente Hoy Digital

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